En concreto
Esas dudas entre lo que es y lo que debe ser
La ondulante realidad se propaga con diferentes mensajes. Pensamientos cruzados entre lo que es y lo que debe ser; entre la fulminante realidad que embistió modificando sus tradicionales códigos a otra menos palpable, colmada de interrogantes y de opiniones enfrentadas.
"No hay que enviar señales negativas, porque lo único que se logra es crear más retracción", opinaba un empresario en estos días. Otro insistía en que el gran desafío consiste en convencer a la gente que la única manera de no descapitalizarse o de ganarle a la inflación es volcando el dinero -pesos o dólares- en ladrillos. "Lo que sucede -insistía- es que han aplicado no sólo el cepo al dólar, sino a la confianza, motor insustituible para el sector y cualquier otro rubro de la economía. Por esa razón, la gente común se pregunta permanentemente qué hacer con los ahorros y si conviene o no mudarse." En el fondo, lo que se advierte es un gran temor a tomar una decisión equivocada. El miedo tampoco ayuda, paraliza.
No hay que descartar que además las dudas se vinculan con los precios. ¿Cuál es el valor de una propiedad hoy? De la pregunta, en un salto, a la cuenta: en dólares o pesos, y luego un imaginario periplo futuro de trámites y declaraciones a los que habrá que someterse actúan también como un freno ante la expectativa de cambiar de casa.
"El que piensa en invertir exhibe otra actitud", se animó un desarrollador. "Está seguro de que como siempre sucede, los malos momentos pasarán y cuando el panorama se aclare la decisión habrá sido acertada." Claro que habría que aclarar qué clase de inversor, el que resguarda los únicos ahorros que logró o alguien con más recursos para hacer frente en los momentos críticos.
En general, el punto de equilibrio combinado con una buena cuota de cautela y abundante información parece ser el camino más acertado hoy aun en tiempos de inestabilidad.
Una certeza: el que invirtió en ladrillos no se equivocó. Pero también seguramente fue importante quién lo asesoró. No sólo importa cuál es el precio, sino qué comprar y dónde. El mes que viene comienza la etapa clave del año, la esperada por todos para lanzamientos, inversión, nuevos proyectos, fuerte demanda. Pero esta vez no hay razones para creer que esto sea posible. Pero aún, en esta inquietante caída es posible conquistar al menos una parte de la demanda convencida de que está a tiempo de poner a resguardo su dinero en propiedades, sea en la ciudad o en las afueras. La compra de lotes en áreas bien ubicadas es un buena decisión: la tierra es escasa y finita. Hay opciones de pagos en pesos en medianos plazos que se pueden considerar. Pero en la ciudad como en las afueras hace falta buen ojo para elegir y un buen asesor que ayude a tomar la decisión acertada..