Ir al contenido principal

3G en Buenos Aires


El 3G en Buenos Aires: un problema sin solución a corto plazo

El escaso espectro radioeléctrico, la poca inversión de las operadoras en infraestructura y el boom de la venta de smartphones son los principales causantes de un servicio defectuoso. 





Felix Ramallo



Chequear el timeline de Twitter yendo en colectivo por Leandro Alem puede ser todo un desafío. Es que una vez que se cruza la estación de Retiro la conexión toma rumbos inciertos. Aparece en algunas cuadras y en otras no. Otras veces ni siquiera hay señal y el símbolo de “llamadas de emergencia” toma el control. Pero la novela entre el 3G y los porteños, el mayor problema se da en esta ciudad, no es algo nuevo ni restringido a un barrio en particular.
Según los consultores entrevistados por Infotechnology.com el problema, en esencia, está basado en tres razones: el escaso espectro disponible, la poca inversión de las empresas en la red e infraestructura y el gran crecimiento del parque de smartphones

Los usuarios conviven a diario con estos problemas, a tal punto que el nivel de tolerancia parece estar llegando a su fin. En noviembre de 2012 comenzó a circular por Facebook y Twitter una invitación a realizar un "apagón de celulares" como protesta por la calidad de servicio que ofrecen Claro, Movistar y Personal
 


Uno de los protagonistas del problema es el espectro radioeléctrico. El mismo no es suficiente para la cantidad de dispositivos que consumen datos en el país. “La última vez que se licitó el espectro fue en 1999 y había 4 millones de líneas. Hoy hay 40 millones de los cuales muchos consumen datos, que tienen números gratis, entre otras facultades. Se multiplicó mucho la carga. Los problemas empezaron con la llegada de los smartphones a gran escala”, sostiene Enrique Carrier, de Carrier y Asociados. “Además, hoy no se usa el mismo espectro, porque el 25 por ciento que adquirió Arsat no está siendo utilizado”, agrega.
De hecho, según datos de Cisco, las conexiones 3G crecieron un diez por ciento en 2012, llegando a 1,3 millones en julio de 2012, frente a los 1,2 millones de diciembre de 2011. La cantidad de smartphones también aumentó. Según datos de Ipsos de mayo de 2012, en el país hay 10 millones de personas con un teléfono inteligente.
“Hace falta instalar más espectro para los operadores. Tendrían que licitarse bandas nuevas de espectro, principalmente la de 1,7 y 2,1 GHz”, asegura Juan Gnius, gerente de Operaciones de Signals. Por otra parte, señala que la inversión es un factor clave, pero igual de importante es ver en qué se invierte. “Si hay licitación de espectro, los operadores van a invertir ahí. En el ‘99 era un espectro que se usaba para voz, hoy es todos datos”.
¿Se podría separar voz y datos por distintas bandas para liberar espectro? Responde Gnius: "con el espectro disponible que tienen los operadores no se puede separar voz de datos. Si se ve al espectro como una autopista, tengo que hacer dos carriles para los autos que van super rápido. Pero esos tienen que ser carriles exclusivos. Todo el tráfico que ya tengo lo voy a tener que meter en otros carriles que van a estar más congestionados aún.
Según datos de 4G Américas, el espectro total de la Argentina en 2012 asciende a unos 170 Mhz. Un valor menor al de Chile (260 Mhz), Brasil (340 Mhz), la Unión Europea (340 Mhz) o Estados Unidos (547 Mhz). En 2002, el espectro del país era el mismo que el actual. La gran diferencia está en su cantidad de usuarios: de 6 millones de usuarios a 37 millones de líneas activas".
De hecho, la cantidad de líneas no es un tema menor dentro de esta problemática. Según el Instituto de Estadísticas y Censos (Indec) en el país se encuentran más 58,8 millones de líneas en servicio. Pero según Carrier, este número resulta excesivo ya que si se consideran sólo las líneas en uso el número desciende a 37 millones
Según el consultor, las líneas en servicio son aquellas que pueden recibir un llamado o un SMS, aún sin saldo a favor. Por lo que una línea prepaga que dejó de utilizarse sigue estando operativa pero no se la podría considerar en uso. 

Por otra parte, la falta de antenas también agrava el problema. Con la explosión de los smartphones la capacidad de las mismas colapsó. Pero la instalación de antenas no es un tema fácil ya que cada municipalidad es la encargada de regular los permisos.
“Las antenas están instaladas de la época donde no había tanto tráfico de datos. Según tengo entendido la mitad de las antenas están con fibra óptica. Por lo que esto puede ser que en algunos casos sea la causa y en otros no”, sostiene Carrier.
Para Pablo Tedesco, director de TBI Unit, en la Argentina el gran crecimiento de la venta de smartphones choca con el nivel de inversión disponible de parte de las empresas por lo que no se llega a cubrir la demanda.
De todas maneras, los problemas de las redes no solo son un mal local. “Por ejemplo, en San Francisco colapsaron las redes por la cantidad de usuarios conectados a datos. Una solución que implementaron fue la de restringir la cantidad de consumo de datos por usuario. De esta forma, cuando un usuario superaba su límite, la velocidad del mismo bajaba, liberando la red”, asegura el consultor.
4G, el gran interrogante
“En todo el mundo hubo un crecimiento en inversiones. En países como Uruguay, Brasil o Colombia, entre otros, se está avanzando en materia de LTE o 4G. Acá no hay ni licitación”, señala Carrier. De todas maneras, esta tecnología también traería un nuevo problema: la necesidad de más antenas.
“Cualquier banda de hoy se puede usar para LTE, pero cuanto más alto es el espectro más número de antenas se necesita para cubrir la demanda. El espectro radioeléctrico tiene esa característica, mientras más alto el espectro menor la propagación de la señal. Por lo tanto para cubrir un área de 2,5 GHz para LTE se necesita mayor cantidad de antenas que si se usa para un espectro de 700 GHz”, sostiene Gnius.
Por otro lado, la licitación no es el único obstáculo. “Los equipos 4G son muy caros, el lanzamiento de esta tecnología implica que haya equipos que son poco accesibles para la gente”, comenta Tedesco.

Entradas populares de este blog

Metrobus 9 de Julio - Paradas

Metrobus 9 de Julio http://movilidad.buenosaires.gob.ar Características: Traza: 3km. Carriles exclusivos desde av. San Juan hasta Arroyo. 5 estaciones (14 paradores). Pasajeros/día: 200.000. 10 líneas de colectivos circularán por la avenida 9 de Julio. 800 colectivos, 180 servicios/hora. El Metrobus de la 9 de Julio mejorará sensiblemente la forma en que nos movemos en el área central de la Ciudad y contribuirá a reducir la polución sonora y atmosférica. Será una etapa más en la historia de un eje dinámico dentro una ciudad dinámica, que debe responder a los desafíos de su tiempo. Aproximadamente 200.000 personas circulan a diario en colectivo por este corredor. Se estima que por la mejora en la calidad del servicio la demanda aumentará en un 25%. Beneficios El traslado de colectivos de Esmeralda y Maipú hacia la avenida generará un ambiente más sano, aire más limpio, menos ruido y mayor seguridad vial para caminar en Microcentro. El peatón ganará e

Los 40 edificios más altos de Buenos Aires

Fuente: SkyscraperPage.com (Actualizado al 2017)

Puerto Madero

Rascacielos de Puerto Madero: ¿una promesa incumplida? 08-05-2013 - 11:46 -  Con la inauguración, prevista para 2015, de una torre que será la más alta del país, el perfil de la ciudad habrá cambiado para siempre. Los desafíos del barrio para integrarse a la identidad de la ciudad Lorena Obiol lobiol@cronista.com   “Puerto Madero, el barrio más nuevo de la ciudad, ya es antiguo”. Es el veredicto de Roberto Converti, arquitecto y urbanista a cargo del planeamiento porteño en el marco del proceso de autonomía de la ciudad, allá por 1996, y quien también presidió la Corporación Puerto Madero entre 2000 y 2002. “Con más de 20 años, ya no forma parte de la modernidad de Buenos Aires. Las normas urbanas se aprobaron entre 1993 y 1997 en sus distintas fases, el masterplan se pensó en 1991 y se fue concretando en el tiempo. Alta en el cielo.  Los edificios más altos que se ven en Buenos Aires. El problema es que se le exige más, cuando en realidad se trata de un proyec